Por Mario Luis Ramos Rocha
Aguascalientes, Ags. 20 de septiembre 2024.- Apenas al iniciar la LXVI Legislatura del Congreso del Estado de Aguascalientes, el impuesto coordinador de la bancada de Morena, Fernando Alférez, sufrió ya su primer revés al fracturarse este grupo parlamentario.
Esto para nadie fue una sorpresa, al existir en ese partido una fuerte inconformidad por la manera como el matrimonio Alférez-Rubalcaba y su cachorro Gilberto Gutiérrez se han apoderado del partido, de las posiciones políticas, de los cargos, de la delegación del Bienestar y hasta de la Clínica del ISSSTE.
Hoy pretendieron hacer lo mismo con la bancada de Morena en el Poder Legislativo y como en este mismo espacio lo habíamos adelantado, Fernando Alférez fue incapaz de mantener la cohesión.
Tras este sonoro descalabro, Fernando Alférez seguramente volverá a llorar lo que como político no supo defender. O acaso su miopía y su soberbia no le permitieron ver lo inminente.
Por supuesto que sus lágrimas ahora no serán derramadas en el programa de José Luis Morales, sino en la dirigencia nacional de su partido, donde señalará a quienes osaron dejarlo en tremendo ridículo y para quienes pedirá no solo la expulsión, sino que los quemen en una hoguera de leña verde.
Seguramente lo va a lograr, pero ni con esa o con 20 pataletas más podrá sacudirse ser el único morenista del país al que diputados de ese partido se le rebelan. Y eso, en los tiempos estelares de la 4T es signo inequívoco de la más absoluta incapacidad para la operación política.
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