Por Mario Luis Ramos Rocha
Aguascalientes, Ags. 3 enero 2024.- “El arte de la guerra se funda en el uso del engaño: cuando se está cerca, se debe parecer lejos; cuando se está lejos, se debe parecer cerca”. Este proceder, relatado por el estratega militar Sun Tzu en el siglo VI antes de Cristo, hoy está siendo aplicado de manera bastante descarada, a pesar de lo cual no muchos se percaten de ello.
Y nos referimos al caso concreto de la, todavía, directora del Instituto de Educación, Lorena Martínez, que ha venido difundiendo toda una serie de rumores para, inútilmente, tratar de ejercer presión y colarse, por donde sea, al Senado de la República.
Si alguien cree que, por la vía del Partido Verde logrará la segunda posición del Senado en la alianza de Morena, deberá sopesar entonces una clara nueva traición a quien ella dice tener lealtad, pues para lograr colarse a la Cámara Alta desde la segunda posición, deberá trabajar para hacer perder al PAN y que el albiceleste solo coloque un senador, sacrificando a otro.
Los ex amigos de Lorena, quienes conocen a la perfección su manera de andar por la vida, apuestan doble contra sencillo a que su verdadera apuesta es crear una guerra psicológica encaminada a que Acción Nacional no la deje ir. Crazo error, en el PAN nada quieren saber de ella.
Y, en lo que respecta a la alianza de Morena, en público y en privado Fernando Alférez Barbosa ha pintado su raya.
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