Por Mario Luis Ramos Rocha
Aguascalientes, Ags. 9 febrero 2024.- A partir de ayer, legalmente el Partido Revolucionario Institucional (PRI), se queda sin edificio sede en Aguascalientes, al determinarse el cumplimiento de las medidas cautelares dictadas en contra de Enrique Juárez y Deniss Ibarra.
Al filo de la una de la tarde, en una audiencia que no duró más allá de 15 minutos, un Juez de Control determinó que ambos indiciados ejecutaron a satisfacción el mandato de acudir a firmar, realizar servicio comunitario y, especialmente, promover la creación de un nuevo fideicomiso para el usufructo de la propiedad que legalmente pertenece a Gobierno del Estado y por la cual deberán pagar una renta mensual de 70 mil pesos, los cuales irán a un fondo de beneficio social que en su momento será determinado.
Enrique Juárez y Dennis Ibarra entregaron al juzgado el acuerdo reparatorio apenas unos minutos antes de la medianoche del pasado 26 de enero, fecha marcada como límite para ello.
Y lo hicieron venciendo su soberbia, pues luego de que hace dos años, en una reunión realizada en el hotel Quinta Real el nefasto Enrique Morán les prometió un arreglo político, por fin se dieron cuenta que había que tomar el toro por los cuernos y pagar un buen abogado que los sacara del embrollo legal en que los metió Lorena Martínez al usar la sede tricolor como casa de campaña durante el proceso de 2018, situación que destapó ante el INE el hecho de que el PRI ocupaba un edificio sin ser éste de su propiedad.
Así, Enrique Juárez, Dennis Ibarra y hasta Lorena Martínez se salvaron de ir presos, pero dejaron sin patrimonio al Revolucionario Institucional, al que, por si fuera poco, debido a su torpe actuar en comicios previos, bajaron significativamente las prerrogativas.
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