Por Mario Luis Ramos Rocha
Aguascalientes, Ags. 10 de junio 2024.- Durante muchos años, pero especialmente en su ejercicio de gobierno, el ladrón Martín Orozco se dedicó, además de robar, a tratar con la punta del pie y perjudicar a todo aquel que no se hincaba a su paso y le rendía pleitesía en voz alta.
Por cada poro de su piel emanaba una increíble soberbia y hoy se enfrenta a la realidad de su séptimo año.
El ladrón Martín Orozco ha comenzado a cosechar lo sembrado, el desprecio generalizado se le clava como afilado aguijón en su maltrecha arrogancia.
Así lo siente cuando camina por la calle, pero una demostración especial de desdén se la propinaron sus propios compañeros de partido cuando, este fin de semana al ladrón Martín Orozco se le ocurrió aparecer en la sede del Consejo Municipal del IEE donde se entregó a Leo Montañez su constancia de mayoría.
Los panistas y uno que otro priísta que ahí se encontraban prefirieron ignorar su presencia. Sólo a su ex asesor y hoy representante de Morena, Miguel Bess-Oberto se le ocurrió saludarlo y luego no se lo podía quitar de encima.
Los ganadores festejaron sin tomarlo en cuenta, nadie se acercó a solicitarle una foto o una selfie, a los medios de comunicación ahí presentes no les pareció interesante entrevistarlo y hasta los funcionarios del INE lo invisibilizaron.
Al final, sin que a nadie le interesara despedirse o acompañarlo, se fue como llegó: solo, a un lado de su esposa e hijos, quienes por cierto, habían llegado sin él.
¿Qué pensabas que ocurriría, Martín? Tu comportamiento te ha ganado ser un apestado social por el resto de tu vida.
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