* El Poder Judicial ha dejado de ser independiente y la democracia ha sido desplazada por un gobierno intolerante.
* No permitiremos que el autoritarismo avance sin resistencia.
Ciudad de México, 5 de noviembre 2024.- El diputado Federal por Aguascalientes Quique Galo lamentó que México perdiera la batalla contra el autoritarismo de Morena y aliados, al concretar el apoderamiento del Poder Judicial.
La seducción del poder hacia una minoría de los ministros de la Suprema Corte de Justicia impidió que la Reforma al Poder Judicial fuera invalidada por sus claras acciones de inconstitucionalidad, refirió.
Lo anterior, dijo, representa la traición a la democracia, a la justicia, y a la independencia de los poderes. Ministras y ministros que renunciaron a su deber histórico por intereses que no son del común de los mexicanos, hundieron el equilibrio de poderes y han permitido que el gobierno federal controle la justicia a su conveniencia.
Expresó su reconocimiento a la entereza, compromiso y valentía de los ministros Norma Piña, Luis María Aguilar, Jorge Pardo, Margarita Ríos-Farjat, Javier Laynez, Alfredo Gutiérrez y Juan Luis González Alcántara.
Sostuvo que, inevitablemente la historia juzgará a quienes defendieron la independencia judicial, pero también recordará a aquellos ministros innombrables que, en un acto de sumisión, cedieron ante la dictadura y traicionaron su deber.
Refirió así que somos testigos del fin de una era democrática en México porque el Poder Judicial ha dejado de ser independiente y la democracia ha sido desplazada por un gobierno al que le estorban los contrapesos y que falsamente dice representar al pueblo.
Quique Galo dejó en claro que aún y con ese panorama adverso, “no permitiremos que el autoritarismo avance sin resistencia”.
Precisó que, al mismo tiempo, se estará cuestionando a la dictadura en cada espacio posible, con la convicción de que México merece un gobierno que sirva a su gente y respete su Constitución.
Dijo que, desde la bancada de Acción Nacional se alzará la voz por quienes no se resignan a vivir en un país donde la justicia y la libertad son un recuerdo distante. “Seguiremos luchando contra esta dictadura disfrazada de democracia y llamamos a los ciudadanos a unirse en defensa de los derechos y las libertades acotadas”.
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